La idea, un poco loca, de crear este proyecto le surgió en 2011 a un grupo de fotógrafos apasionados por el paisaje: Jérôme Brézillon, Fred Delangle, Cédric Delsaux y Patrick Messina. Compartiendo una misma admiración por el proyecto fotográfico de la DATAR, mítica misión que marcó la historia de la fotografía. Este grupo de fotógrafos soñó con una segunda parte de esta misión que en una sola edición entregó un testimonio valioso y excepcional de los jóvenes creadores de los años 80. Así, partiendo de esta idea y con el objetivo de generar una cultura colectiva y subjetiva del paisaje en transformación, nació Francia(s) territorio líquido. Este colectivo independiente, libre de toda atadura, se desarrolló progresivamente hasta finalmente reunir a 43 fotógrafos. Cada uno, según su sensibilidad, se dio a la tarea de buscar cómo representar el territorio francés contemporáneo.

Durante tres años, los artistas exploraron en su trabajo el “territorio líquido”, cuyas fronteras son cada vez más difíciles de definir: fronteras geográficas, fronteras entre la ficción y lo real, fronteras afectivas, íntimas y territorios virtuales, desde una percepción que pretende ser ante todo sensible.

Liberándose del yugo de lo documental, la fotografía adquiere aquí una dimensión de ficción y artística para convertirse en un espacio de descripción conceptual. Va más allá de la simple postura de la representación de la realidad para arrojar una mirada artística, original y desafiante sobre el mundo.

Los paisajes nunca son estáticos; cambian constantemente en función del clima y de las intervenciones del hombre. Una intervención significativa ha sido la división de tierras en territorios bien definidos llamados naciones. Con base a estos territorios se han determinado diferentes características humanas que han servido para moldear las identidades nacionales.

A finales de 2010, un grupo de fotógrafos que residía en uno de esos territorios nacionales, llamado Francia, decidió emprender un nuevo proyecto fotográfico. Su objetivo era explorar cómo podría la fotografía definir las principales características de la identidad y el territorio franceses de principios del siglo XXI.

Durante los últimos tres años, más de cincuenta personas participaron activamente en ese proyecto fotográfico, trabajando con total libertad para crear una nueva visión del territorio francés. El resultado es esta exposición en la que cuarenta y tres fotógrafos exponen su trabajo por primera vez.

Estos fotógrafos tratan una gran variedad de temas: la globalización, el antropoceno, la memoria, los cambios tecnológicos, la subjetividad, el concepto de nación y la migración desde diferentes perspectivas. No obstante, todos estos proyectos tienen un elemento en común; la noción que todas las fronteras son temporales y líquidas y cambian en función de la política y la tecnología.

Algunos de estos fotógrafos se han dedicado a darle visibilidad a lo invisible, a las fronteras olvidadas o desaparecidas. Muchos de ellos han cuestionado las fronteras culturales y artísticas establecidas entre el pasado y el presente así como entre la realidad y la ficción. Varios de ellos han trabajado en un sólo sitio mientras que otros han viajado por distintas regiones de Francia en el marco de su práctica artística.

Este proyecto fotográfico no es una topografía sistemática. Nunca se ha tratado de eso. Tampoco se trata de una topografía impresionista. Se trata de una exposición visual provisional sobre el estado de los territorios franceses y también de una investigación libre sobre la naturaleza de la nación europea y del proceso fotográfico. Se trata posiblemente del proyecto fotográfico más importante que se haya realizado en Europa en los recientes treinta años.

Este proyecto nos lleva a preguntarnos: ¿cómo se define una nación en una era de rápidos cambios tecnológicos, durante la cual las fronteras las definen las ondas electromagnéticas y no los muros, una era en la cual las decisiones pasan de estar en manos de los parlamentos a estar en manos de las juntas directivas? En cada una de sus obras, estos fotógrafos se preguntan: ¿cómo podemos visibilizar hoy en día esta nación llamada Francia?