Quedan unos meses para que se dispute la final de la Fed Cup entre Francia y República Checa (12-13 noviembre) pero ya se van conociendo detalles de la cita. Quizás uno de los más importantes ya es oficial: la sede. Se jugará en el Rhenus Sport Arena de Estrasburgo en pista rápida indoor.

La ciudad del este francés pondrá punto y final a la temporada 2016 de Fed Cup, el colofón a una nueva entrega de la competición por países más importante del tenis femenino. El pabellón elegido es la casa del equipo de baloncesto local, el Estrasburgo. Para la cita de noviembre, la capacidad del Rhenus Sport Arena ascenderá a 6.000 personas. Todo un estallido de luz, color y sonido que sólo se produce en Fed Cup.

Será la primera vez que Estrasburgo viva una serie de Fed Cup, pero ya sabe lo que es ver tenis. En 2005 ya se jugó en el mismo Rhenus Sports Arena una serie de Copa Davis entre Francia y Suiza de primera ronda.

Este noviembre viviremos el séptimo cruce entre Francia y República Checa en Fed Cup. Ambas buscan una corona de la cual tienen memoria reciente muy distinta. Francia busca reinar en el tenis femenino por primera vez desde hace 13 años. En 2003 levantó su última Fed Cup. Sin embargo, República Checa domina con una autoridad insólita la competición. En Estrasburgo buscará su quinto título en seis años.

En lo que si coinciden ambos equipos es en su forma de alcanzar la final. Tanto francesas como checas resolvieron en el quinto punto sus series de semifinales. Francia recibía a Holanda en Trélazé y tras los tres primeros puntos, las holandesas tenían ventaja 1-2. Caro García forzó el quinto punto y, en el partido de dobles, la pareja especialista francesa formada por la propia Caroline García y por Kristina Mladenovic obraron el milagro de remontar la semifinal y meter a Francia en la final de Fed Cup.

Por su parte, República checa superó una difícil visita a Suiza. Hasta dos veces se adelantaron en el marcador las actuales campeonas, viéndose empatadas otras tantas. El dobles se mostró decisivo y ahí la pareja checa no dio opción a las suizas pese a la participación de Martina Hingis del lado helvético.

En el histórico se reparten las victorias (3-3). Curiosamente, cinco de estos cruces fueron sobre tierra batida (tres victorias francesas por dos checas). El único precedente en dura, para las checas, que además fue el último partido entre ambas, en las semifinales del Grupo Mundial de la temporada pasada.