Postcards from America: X-rays from Hell es un escrito de 1989 del artista norteamericano David Wojnarowicz que le presenta al lector la sensación de que las palabras e historias que se comparten —las de los primeros días del VIH/SIDA en la comunidad homosexual de Nueva York— conllevan una narrativa de valentía y homenaje a todos aquellos que se expresaron ante la adversidad. En esta exposición homónima organizada por Celaya Brothers Gallery, las obras atestiguan actos atroces de violencia institucionalizada y racismo, en un caos tóxico que —hasta ahora— parece no tener fin.

Los mensajes compartidos en las obras de Lee Lozano, Josh Reames, Nina Chanel Abney, Mathew Zefeldt, Dave Mckenzie y Sofi Brazzeal cobran mayor importancia hoy más que nunca ante las crecientes tendencias fascistas que han llevado a Estados Unidos a una crisis democrática y social.

Pinturas, signos, dibujos o palabras, se utilizan para el mismo propósito: representar una imagen de la vida norteamericana contemporánea a través del lenguaje y la semiótica, la repetición figurativa y el uso de jeroglíficos modernos. El mensaje es uno: una sociedad bombardeada por un exceso de información que destruye a los oprimidos a costa de los que están en el poder.

La “obra escrita” de Lozano es un manifiesto de políticas personales que comparte inevitablemente con el espectador; de la misma forma, el pendón de Mckenzie se asemeja a un meme cuyo sombrío mantra muestra el claro límite entre realidades. La multiplicación de imágenes de Zefeldt respalda esta idea, una perspectiva mucho más representativa de la cultura pop y los videojuegos. Zefeldt crea huellas que se solidifican en arreglos de naturaleza muerta, un embudo mental que simula la era digital en la que habitamos.

Nina Chanel Abney trata temas polémicos utilizando la representación y la abstracción con la inmediatez de un sitio web actualizado o de un feed de Twitter. Las pinturas de Josh Reames son un diálogo superpuesto de corrientes de información que corresponden a nuestras luchas sociales cotidianas. Y finalmente, Sofi Brazzeal se enfrenta a la petulancia y al fetichismo de la opresión y la crueldad, canalizándolos de vuelta al papel, una alquimia de cómo la dominancia patriarcal se visualiza como norma.

Por medio de lenguaje individual —y en conjunto—, Postcards From America evidencia el deseo de interconexión social, aunado a la verdad lúgubre de que la fetichización de una Gran América se ha cauterizado en el tejido de Estados Unidos.