Arte y China después de 1989 presenta obras de aproximadamente 60 artistas y colectivos clave que han trabajado tanto en China como en el resto del mundo y que con su provocadora crítica aspiran a forjar una realidad libre de ideología, a reforzar el papel del individuo al margen de lo colectivo y a definir la experiencia contemporánea en China en función de una perspectiva universal. Enmarcada entre el fin de la Guerra Fría y los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008, la exposición examina la experimentación artística en un período caracterizado por el comienzo de la globalización y el nuevo auge de China en la escena mundial. El subtítulo de la exposición, El teatro del mundo, procede de una instalación del artista Huang Yong Ping, residente en París. Esta pieza en forma de jaula, que alberga en su interior diferentes especies de insectos y reptiles, constituye una metáfora de la era de la globalización y se inspira tanto en la cosmología china como en las ideas occidentales de la época de la Ilustración sobre el panóptico como estructura de control y en la crítica de la modernidad de Michel Foucault.

El año 1989 supuso al mismo tiempo un final y un principio para el arte y para China. La represión militar del movimiento estudiantil de protesta en Tiananmén durante el Incidente del 4 de junio marcó el fin de una década de exploración política, intelectual y artística relativamente abierta. También señaló el comienzo de una serie de reformas que, si bien se llevaron a cabo bajo condiciones autoritarias, iniciarían una era de desarrollo acelerado, de interconexión internacional y de nuevas posibilidades para el individuo. Los artistas fueron catalizadores de los enormes cambios que se iban sucediendo, pero también se mostraron escépticos ante ellos. Adoptaron la posición crítica y las propuestas abiertas del Arte Conceptual internacional para crear performances, pinturas, fotografías, instalaciones y vídeos, y pusieron en marcha distintos proyectos de activismo buscando la implicación directa en la sociedad. Su entrada en escena durante la década de 1990 y principios de la de 2000 coincidió con el momento en que el arte occidental empezaba a mirar más allá de sus centros de producción tradicionales y el fenómeno del arte contemporáneo global iba tomando forma. Los artistas chinos desempeñaron un papel crucial en esta evolución.

Arte y China después de 1989 está organizada en seis secciones cronológicas y temáticas, que se distribuyen a lo largo de las salas de la segunda planta del Museo. Si bien la exposición abarca una gran diversidad de propuestas, todos los artistas tienen en común su búsqueda de una reflexión que trasciende las luchas políticas de China y la simplicidad de los dogmas de Oriente-Occidente. La libertad de un “tercer espacio” les aportó una distancia fundamental y una visión singular para lidiar con el legado de la historia de China, la modernidad internacional y el neoliberalismo global de los años noventa. Su gran creatividad permite que desarrollemos nuestra visión cada vez más amplia del arte contemporáneo y estimula nuevas maneras de pensar en un momento en que las cuestiones que estos autores han abordado (identidad, igualdad, ideología y control) tienen una mayor relevancia.

Exposición organizada por Alexandra Munroe, Curator senior ‘Samsung’ de Arte asiático y Asesora senior de Artes globales, Solomon R. Guggenheim Museum; con los comisarios invitados Philip Tinari, Director, Ullens Center for Contemporary Art, Pekín, y Hou Hanru, Director Artístico, MAXXI, Museo Nazionale delle Arti del XXI Secolo, Roma

Para este proyecto, se ha contado con la ayuda curatorial de Kyung An, Curator adjunta de Arte asiático y de Xiaorui Zhu-Nowell Investigadora adjunta y Ayudante curatorial del Solomon R. Guggenheim Museum