La palabra LED (light- emitting diode) que en español se traduce como diodo emisor de luz, ha irrumpido con fuerza en el panorama tecnológico y también en cuanto a iluminación se refiere. Pantallas de móviles, televisiones, tablets, ordenadores o bombillas son solo algunos de los productos que se han apuntado a esta moda para aprovechar todas sus ventajas.

La tecnología LED suponen un gran adelanto y entre sus propiedades destaca su larga duración. Pero, ¿cuánto exactamente? No hay conformidad en este punto. Algunos establecen que pueden durar unos 15 años utilizándolas una media de 8 horas y otros aseguran que pueden llegar a los 30 años. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) realizó un estudio el pasado año donde afirman que la vida de este tipo de bombillas no es tan larga como aseguran algunos fabricantes[1].

Incluso instituciones culurales han cambiado sus lámparas halógenas por LEDs como es el caso del Museo del Prado. El motivo es el color, este tipo de luz reproduce de forma fidedigna los colores del original gracias a una amplia gama cromática, por lo que pueden apreciarse con claridad algunos detalles que pasaban desapercibidos antes.

En cuanto al tema económico, la factura mensual de la luz también es algo que preocupa a muchos. Es cierto que actualmente la inversión a la hora de cambiar las bombillas del hogar a LEDs es bastante alta: cada una puede llegar a costar hasta 15 euros dependiendo del establecimiento. Pero la recompensa es una reducción en el consumo de hasta el 85 % con respecto a las tradicionales. Además, con el encendido instantáneo que proporciona este sistema de iluminación se puede disfrutar y aprovechar de toda su capacidad desde el primer momento.

La iluminación LED es respetuosa con el medio ambiente. Permite un gran ahorro ecológico debido a que reduce el número de emisiones de CO2 a la atmósfera. También consigue disminuir la cantidad de contaminación lumínica.

Además del elevado coste de las bombillas LEDs, su resistencia a las altas temperaturas es otro de sus grandes inconvenientes, ya que a partir de los 65º se deterioran. A pesar de esto, las ventajas predominan sobre las desventajas. Aunque la tecnología sigue avanzando en el ámbito de la iluminación y ha aparecido una nueva fórmula que puede hacerle la competencia. Se trata de la luz plana, que se caracteriza por un muy bajo consumo de energía, traducido en 0,1 vatios por hora, y por el consiguiente bajo coste.

Notas

[1] http://www.ocu.org/vivienda-y-energia/gas-luz/noticias/bombillas-led