Hablar de @IsabelitaVirtual es hablar de cómo una red social puede cambiar la vida de sus usuarios y ayudarles a conseguir el éxito profesional. Y es que en la era digital en la que vivimos, internet se ha convertido en algo totalmente indispensable en nuestras vidas. El Smartphone parece ser una extensión de nuestro cuerpo y las redes sociales son la vía de comunicación más extendida entre usuarios y marcas y, en este entorno, nuevas profesiones como Bloggers, Youtubers o Influencers están en boga y parecen ser una buena forma de convertir una afición en una forma de vida e incluso una salida laboral que, en los mejores casos, lleva a estos profesionales a colaborar con grandes marcas cobrando importantes cantidades de dinero, e incluso a convertirse en algo parecido a una celebrity.

El caso de @IsabelitaVirtual es diferente. Hasta hace apenas cinco años el alter ego de Isabel Martinez era una completa desconocida que trabajaba como redactora en una importante agencia de publicidad y que decidió abrirse un perfil en la red social de fotografía por excelencia. Desde ese momento, en 2011, esta joven catalana ha sido testigo de cómo Instagram ha encumbrado su carrera a lo más alto de la creatividad de moda. Con una extraordinaria delicadeza y un gran sentido de la estética, @IsabelitaVirtual se ha convertido en una de las instagramers desconocidas con más seguidores del mundo, título que le ha valido para trabajar con las mejores firmas de moda, desde Delpozo, Dior, Kenzo, Tiffani & Co o Carolina Herrera hasta Coach, Viktor & Rolf o &OtherStories, entre otras tantas. Pero los méritos que atesora en su curriculum vitae no quedan ahí. Gracias al esfuerzo y talento que desprenden sus fotografías, Isabel Martinez quedó finalista en 2012 entre los mejores 25 fotógrafos del mundo en un concurso organizado por Vogue Italia, un título un tanto paradójico si tenemos en cuenta que la propia Isabel Martínez admite no tener ni idea de técnica y composición, y que empezó en esto de la fotografía con su Iphone como única herramienta. Precisamente este es uno de esos casos que demuestran que la genialidad de la fotografía no reside en el dispositivo o la técnica, sino en la mirada detrás de cada imagen y en las historias y sensaciones que se quieren trasmitir.

Pero Instagram no ha supuesto únicamente un enlace entre Isabel y el mundo de la fotografía. Es una potente red social con la que, a pesar de incumplir los supuestos dictados de las redes sociales sobre la actualización diaria, el uso de hashtags y demás normas no escritas, nuestra protagonista ha sabido construir una identidad digital muy fuerte gracias a la cuál en 2014 The Cut by New York Magazine la situó en la lista de las 50 voces imprescindibles de Fashion Social Media a seguir. Y es que, si hay una cualidad a destacar en Isabel, es una visión artística de la moda, más allá de los artificios de la industria y de las reglas de Instagram, que aporta a sus fotografías una estética particular, muy focalizada en los pequeños detalles, con aires oníricos y aspiracionales, que hace de cada una de sus imágenes un mundo mágico.

En estos escasos cinco años de fulgurante carrera en el mundo de la fotografía de moda, también hemos podido ver su particular estilo en editoriales de Vogue Italia o W Magazine. Su personal y delicado punto de vista y la forma en que @IsabelitaVirtual vuelca su alma en cada una de sus composiciones demuestran que su éxito no es fruto de un golpe de suerte sino del talento que derrocha. Tanto es así que Katy Barker, conocida por descubrir a Craig McDean y Terry Richardson, la escogió para formar parte de su equipo en su agencia de Nueva York, de tal forma que, desde hace un año Isabel vive en la ciudad de los rascacielos y forma parte de la gran familia de Baker, quién ha desligado la faceta de influencer de @IsabelitaVirtual de la nueva profesión como fotógrafa de Isabel Martinez.

Tan sólo cinco años le han bastado a esta barcelonesa para alcanzar el éxito en el mundo de la fotografía de moda, un éxito que promete seguir ofreciendo grandes trabajos a la vez que una casi anónima Isabel Martínez sigue aprendiendo y esforzándose por mostrar esa cara del universo fashion que emociona, conmueve e ilusiona, porque según afirma: “la creatividad es lo que debería mover este negocio”. Una visión acertada que le ha valido para demostrar que su lado creativo es su mayor activo y que con pocos medios pero bien utilizados se pueden conseguir importantes objetivos. Solo nos resta añadir ¡larga vida a Instagram!