Para todos los que vivimos en este lado del mundo, y también para los que viven del otro lado, la llegada del mes de diciembre avecina una de las épocas más gustosas del año, la navidad, que, si bien es cierto, nació como una celebración religiosa para conmemorar el natalicio de Jesús, el hijo de Dios, como lo narra la tradición cristiana, se ha convertido en una época en la que no solamente los creyentes forman parte de ella, pues Jesús ya no es el único personaje involucrado en esta celebración.

También, todos pensaríamos que la Navidad, en todo el mundo cristiano, se celebra en las mismas fechas, la noche del 24 de diciembre (la Nochebuena) y el 25 de diciembre la, Navidad; no obstante, esto no sucede de tal manera con los cristianos del medio oriente, como lo son la Iglesia armenia y la Iglesia ortodoxa, por mencionar algunas, quienes celebran la navidad en fechas diferentes al resto de los cristianos.

En un principio, toda la cristiandad celebraba la Navidad el 6 de enero, sin embargo, por distintos factores, algunos relacionados con la religión, la Navidad pasó a celebrarse en diferentes fechas, dependiendo del culto cristiano que se practique. La versión de la Iglesia armenia narra que, en tiempos de los romanos, el día 25 de diciembre se llevaba a cabo la celebración del Dios-Sol, como los intentos de la Iglesia occidental (o Iglesia de Roma) por eliminar esa celebración pagana, no habían sido tan fructíferos, los altos mandos decidieron fusionar esa celebración con el nacimiento de Jesús, relacionándolo como la Luz del Mundo. Los armenios, por su parte, que se encontraban geográficamente lejanos y ajenos a las festividades de Roma, por desconocimiento de las mismas, mantuvieron la celebración de navidad el 6 de enero; por lo que el 5 de enero de celebra la víspera de Navidad y el 6 de enero, la Navidad.

El caso de las Iglesias ortodoxas es un tanto distinto. Tras la Revolución de Octubre de 1917 ocurrida en Rusia, el país decidió adoptar el calendario gregoriano que se había extendido por toda Europa desde el siglo XVI; la adopción de este nuevo calendario, había desplazado la celebración de todas las fechas religiosas 13 días respecto al calendario seglar. Esto no agradó a las autoridades eclesiásticas de la Iglesia ortodoxa por lo que las iglesias de Rusia, Jerusalén, Georgia y Serbia decidieron conservar las fechas religiosas originales, lo que las desplazaría 13 días, quedando así la Nochebuena Ortodoxa el 6 de enero y la Navidad el 7 de enero. Ante esta curiosa situación, nos encontramos 3 fechas en la que podemos celebrar la navidad, y probablemente, recibir regalos esos tres días.

Celebremos la Navidad el 25 de diciembre, el 6 o el 7 de enero, estemos en Medio Oriente o de lado occidental, el propósito de la Navidad será siempre el mismo, para los creyentes, un día especial para conmemorar la llegada del Mesías que redimiría al mundo del pecado, para los no creyentes, simplemente una época de reunirse con la familia, reflexionar sobre lo que ha pasado, y convivir con todos los seres felices. También, un personaje que siempre estará presente en esta época navideña será Santa Claus, San Nicolás o Papá Noel, ese simpático hombre obeso con traje rojo y barba que trae regalos a los niños que se han portado bien. Así como también, es común encontrar en los centros comerciales, plazas públicas y en los hogares, el nacimiento o pesebre, que consiste en recrear la escena del nacimiento de Jesús en un pesebre, conforme lo narra la tradición cristiana.

Estemos donde estemos, disfrutemos estas fechas: ¡Feliz Navidad!