En la década de 1920 la tumba de una niña ofrendada a las divinidades incas fue violentada. Sufriendo tanto su cuerpo como así también los numerosos objetos del ajuar, las consecuencias del tráfico ilegal de bienes culturales.

Trasladada a Buenos Aires y paulatinamente despojada de los elementos que la acompañaron, pasó por varios dueños durante ocho décadas. El conjunto, hoy alterado considerablemente, sirve como lamentable ejemplo de las consecuencias que ocasiona la falta de conocimiento y el descuido con nuestro patrimonio cultural.

Luego de ocho décadas de vagar por distintas colecciones privadas la "Reina del Cerro" o momia de Chuscha y su pequeño ajuar, vuelven a Salta gracias a la donación del Dr. Matteo Goretti.

Por Decreto Nº 199-037166/06 la Provincia de Salta hace efectiva la voluntad del donante y suma a su patrimonio cultural este importante testimonio del mundo Inca.

Es nuestro compromiso, como institución titular de cultura, velar por su cuidado, estudio y comprensión; presentándola a toda la sociedad en un marco de profundo respeto.