José Francisco de San Martin y Matorras, nació en Yapeyú, en febrero de 1778 y falleció en Boulogne-sur-Mer, Francia, en 1850. Militar argentino y libertador de Argentina, Chile e inicialmente de Perú. Su padre, Juan de San Martín, era español y militar del ejército español. Fue nombrado gobernador del departamento de Yapeyú, Virreinato del Río de la Plata con sede en Uruguay. Su madre, Gregoria Matorras, era argentina. Luego de un tiempo, la familia se trasladó a Buenos Aires y de ahí se fueron a Cádiz en España, luego a Málaga, cuando San Martín tenía apenas 6 años.

Estudió en el Real Seminario de Nobles de Madrid y luego inició en Málaga su carrera militar como cadete en el regimiento de Murcia, siendo luego enviado a combatir al norte de África. En Melilla peleó contra los moros. En 1808 el ejército de Napoleón Bonaparte invadió España. San Martín participó en numerosas batallas con el ejército español contra los franceses, llegando por su valor e inteligencia hasta el grado de teniente coronel del ejército español. De porte muy elegante (medía un metro ochenta centímetros), su figura resaltaba por encima de los otros militares.

Estando en Cádiz, supo del inicio de la lucha de independencia en América del Sur. En mayo de 1810 el pueblo de Buenos Aires inició una revolución contra los gobernantes españoles, tras lo cual fue destituido el virrey español y nombrado en su lugar un triunvirato.

San Martín renunció al ejército de España, y de ese país se fue a Londres en 1811, donde al parecer hizo contacto con Francisco de Miranda y Simón Bolívar y otros revolucionarios de América cuyas aspiraciones de liberarla del yugo español él apoyó.

Llegó a Argentina en 1812, y al poco tiempo de estar ahí, en unión de un grupo de militares, entre los cuales estaban Carlos María Alver, Bernardo Monteagudo y otros, fundaron la Logia Lautaro (con influencia de los masones) en Buenos Aires, e idearon un plan de lucha contra los españoles. La Junta que gobernaba esa ciudad recelaba de San Martín debido a sus antecedentes militares y familiares. El grupo de la logia logró apoyo popular y militar y en octubre de 1812 el triunvirato existente fue depuesto, debido a que, en el tiempo transcurrido de su gobierno no había tratado de generalizar la revolución en toda la Argentina.

San Martín había sido nombrado teniente coronel de caballería, asignado a un regimiento de granaderos lleno de deficiencias en cuanto a personal y equipo. Por esa fecha San Martín se había casado con María de los Remedios Escalada, perteneciente a una familia argentina muy rica y respetada, la cual ayudó económicamente al regimiento de granaderos; éste vigilaba las costas del río Paraná. Con ese ejército, San Martín, en la llamada batalla de San Lorenzo, derrotó a una tropa de realistas en febrero de 1813, lo cual acrecentó su prestigio.

Los nuevos gobernantes, en vista de que el general Manuel Belgrano había sido derrotado por los realistas en el alto Perú (luego Bolivia), lo sustituyeron nombrando a San Martín general en jefe del Ejército del Norte. Éste lo organizó y cruzó la cordillera de los Andes y atacó la ciudad de Lima, pero por problemas de salud sufrido por él y debido a una resistencia grande de los españoles, retrocedió y regresó a la Argentina.

En 1814 lo nombraron gobernador de las Provincias Unidas del Río de la Plata; luego, en la ciudad de Mendoza fue visitado por los generales Bernardo O´Higgins y José M Carrera, quienes no habían podido derrotar a las fuerzas españolas en Chile, y venían a proponerle que se juntaran ambos ejércitos para liberar Chile. Con gran dificultad por falta de recursos, al extremo que su esposa donó sus joyas para comprar armas, organizó con los otros dos generales la campaña.

El ejército de San Martín volvió a cruzar los Andes en sólo veinticuatro días y en febrero de 1817, sus tropas llegaron a Santiago de Chile y su ejército derrotó a los realistas en las batallas de Chacabuco y Maipú. El nuevo Gobierno chileno nombró a San Martín «Director Supremo», pero él rechazó el nombramiento y este fue concedido a O´ Higgins, su colaborador.

Con ayuda del Gobierno de Chile encaminó su ejército en julio de 1821 hacia Perú, librando varias batallas y ocupando Lima y declarando la Independencia del Perú de España. Por esa razón fue nombrado «Protector del Perú». Sin embargo, aún permanecían remanentes importantes del ejercito realista en las tierras peruanas, que fueron luego derrotadas por Bolívar.

Tras la ocupación de Guayaquil (los peruanos la consideraban parte de su país), luego de las batallas de Riobamba y Pichincha con lo cual Simón Bolívar liberó a Quito. Se reunieron en Guayaquil San Martín y Simón Bolívar los días 26 y 27 de julio 1822. No se sabe a ciencia cierta qué discutieron ambos libertadores, pero, como conclusión del proceso, San Martín decidió apartarse de continuar la lucha. Se devolvió a Lima y luego se retiró de los cargos políticos y militares que ostentaba en el Perú. Regresó a Mendoza en Argentina, anunciando también ahí su retiro de las actividades políticas y militares, regresándose a Buenos Aires en 1823, donde falleció su esposa.

En 1824, se embarcó con su hija a Europa, ya no se encontraba bien de salud y comenzaba a tener trastornos visuales, además, tenía muchas dificultades económicas. Para poder radicarse en el pueblo francés de Boulogne-sur-Mer, requirió de la ayuda económica de su antiguo compañero de armas en España, el militar Alejandro Aguado, quien le facilitó dinero. Falleció a los 72 años en agosto de 1850, siendo solamente acompañado en ese momento por su hija, el esposo de esta y sus nietos.

San Martín es reconocido por su perfil heroico, por sus triunfos militares, pero también por su grandeza interior, teniendo una trayectoria limpia de caballero honorable y respetuoso. Cada vez que conquistaba una región o país dejaba los nombramientos que se le hacían, conformándose con ganar para los pueblos su libertad por la que luchaban.

Fue enterrado en Boulogne-sur-Mer en Francia, pueblo donde vivió sus últimos años. En 1880 sus restos fueron traídos a Buenos Aires, Argentina. Impresiona que él y Simón Bolívar, los dos mas grandes generales iberoamericanos, que gastaron su capital y dieron su vida por la libertad de los países de Suramérica, murieran tan abandonados, en la pobreza y la soledad por sus amigos y compañeros de armas.

A San Martín títulos le sobraron, entre los más importantes estaban: General en jefe del Ejército Libertador de Chile. Comandante en jefe del Ejercito Libertador del Perú, Protector del Perú y finalmente Padre de la Patria y Libertador de Argentina.

Bibliografía

Barcia Trelles, Agusto. (1943): Historia de San Martín. Buenos Aires. Argentina. Ediciones Aguilar.
Canogil, Pablo (2005): Batalla por la libertad de Buenos Aires. Buenos Aires. Argentina. Ediciones Colince. Ruiz Marín, Isidora (2004): Campañas Militares Argentina. Buenos Aires. Ediciones EMECE. Tomo I.
Wikipedia. (2019). José de San Martín.