La Comisión Europea (CE) ha propuesto mejorar la asistencia consular en terceros países y actualizar las normas relativas a los documentos temporales necesarios para viajar de forma urgente, tales como el pasaporte, de forma que su proceso de adquisición sea más rápido y seguro para los europeos.

Los pasaportes perdidos o robados representan más del 60% de los casos de asistencia consular. En esta línea, la comisaria europea de Consumo, Vera Jourová, afirmó que «perder el pasaporte o que se lo roben es una experiencia angustiante, especialmente si se viaja fuera de la Unión Europea (UE). Cuando esto sucede, los ciudadanos de la UE tienen derecho a obtener documentos temporales de emergencia».

Asimismo, «los documentos de viaje de emergencia actuales no cumplen con los estándares de seguridad modernos y ofrecen poca protección contra el fraude y la falsificación», informó la CE en un comunicado y añadió que «como resultado, algunos terceros países son reacios a aceptarlos».

«Las nuevas características de seguridad que proponemos para los documentos de viaje de emergencia evitarán que los delincuentes los falsifiquen o los utilicen para llevar a cabo actividades delictivas», subrayó Jourová.

Con la aplicación de estas medidas, los nuevos documentos de viaje de emergencia de la UE serán más seguros, dadas sus características técnicas, y más rápidos, ya que tendrán que ser emitidos en un plazo de 3 a 4 días.

Además, la nueva directiva mejorará la asistencia consular disponible para todos los ciudadanos de la UE, incluso cuando estén en un país no tenga una embajada o un consulado de su país.

«Será obligatorio que las embajadas o los consulados de todos los países miembros emitan los documentos de viaje de emergencia de la UE a los ciudadanos de la UE no representados», informa la nota.

Según un informe del 2015, más de 30 millones de ciudadanos europeos viven permanentemente en un país no perteneciente a la UE y casi siete millones de ciudadanos de la UE viajan o viven temporalmente fuera de la UE en un lugar donde su Estado no tiene una embajada o consulado y se espera que este número aumente a 10 millones para 2020.

En este sentido, la Alta representante para la Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, recordó que «el Tratado de Lisboa tiene como objetivo garantizar el derecho de los ciudadanos de la UE a la protección consular y diplomática en un tercer país, aunque el Estado miembro del que son parte no está representado».

Ahora toca esperar que estas medidas sean aplicadas de manera efectiva por parte de las instituciones correspondientes, para que los ciudadanos sean capaces de solucionar problemas, tales como el robo o pérdida de documentación, de la forma más rápida posible y con toda la ayuda que necesiten.