Nace en Tréveris, Prusia Occidental, hoy Alemania, el 5 de mayo de 1818. Político, revolucionario, filósofo, sociólogo y economista alemán.

Padre del materialismo dialéctico e histórico. Fundador y dirigente principal de la Primera Internacional.

Descendiente de una familia de rabinos. Su padre era hijo de rabino y un abogado judío, liberal y próspero que llega a ser dueño de viñedos y se convierte posteriormente al luteranismo para defenderse de las legislaciones antisemitas imperantes.

Se discute hasta qué punto el judaísmo de la familia influye en el pensamiento de Marx.

Marx es bautizado en una iglesia luterana, pero en su adultez renegó tanto de la religión hebrea como de la cristiana y opta por el ateísmo y el materialismo.

Lee La esencia del cristianismo de Ludwig Feuerbach y bajo su influjo dice que: La religión es el opio del pueblo.

Estudia en las universidades de Bonn, Berlín y Jena. Para complacer a su padre empieza con la carrera de Derecho, pero luego se va decantando por la filosofía. En su juventud escribe poemas de dudosa calidad. Trabaja como periodista y jefe de redacción en la Gaceta Renana de Colonia, un medio de orientación demócrata y radical.

En 1843 se casa por la iglesia protestante con la baronesa Jenny von Westphalen, la compañera de toda su vida, con quien procrea siete hijos de los cuales les sobreviven tres hasta la edad adulta. Se dice que tuvo otro hijo llamado Freddy con Helene Demuth, su ama de llaves.

Al principio Marx forma parte de los conocidos como jóvenes hegelianos, más tarde hegelianos de izquierda, y su suegro lo convierte en seguidor de las ideas socialistas de Saint Simon.

Entre los filósofos que más le influyeron hay que mencionar al alemán idealista Guillermo Federico Hegel y al materialista Ludwig Feuerbach. Del primero aprende la dialéctica: del segundo, el materialismo, aunque luego se vuelve crítico de sus maestros y construye su propia síntesis: el materialismo dialéctico e histórico. Hay quienes reconocen a Hegel como el padre filosófico del marxismo.

Marx establece una fuerte y duradera relación de amistad y colaboración con el empresario comunista alemán Federico Engels, quien también es su coautor y patrocinador.

En economía comienza por estudiar a los clásicos, especialmente Adam Smith y David Ricardo. Del primero aprende la tesis de que los seres humanos se mueven por intereses y la teoría del valor-trabajo. Pero también termina siendo un crítico de la economía política clásica.

Marx es el inventor del término capitalismo (Smith le llamó sistema de la libertad natural) porque desde su punto de vista el capital es la piedra angular de dicho modo de producción.

Fue un analista crítico a ultranza de la Revolución Industrial y del capitalismo, calificándolo de explotador y anunciando su inminente colapso y final, pues sería enterrado por la revolución mundial del proletariado y sustituido primero por una dictadura socialista del proletariado y luego por el comunismo entendido como sociedad sin estado y sin clases sociales.

Sin embargo, también reconoce aspectos positivos y progresivos en el papel histórico de la burguesía, la cual a su juicio es revolucionaria, ya que entierra al modo de producción feudal y crea un mercado mundial y un sistema económico moderno e interdependiente y con grandes avances técnicos y científicos de beneficio para la humanidad.

Asimismo, se manifiesta como adversario mordaz de las diferentes formas de socialismo que le precedieron o que le disputaban el espacio político durante su vida y a los cuales calificó de «socialismo utópico»; así como del anarquismo de Mijaíl Bakunin y de Pierre Joseph Proudhon.

Varios de los rivales de Marx dentro del campo socialista se quejaron de su carácter autoritario, intolerante y excluyente. Como polemista Marx es demoledor, implacable e incluso fuertemente burlón. De toda la intelectualidad socialista de la historia humana, Marx solamente acepta y reconoce como «políticamente correcto» a Federico Engels.

Para Marx la única verdad filosófica, económica, política y social es la suya (y la de Engels) y todas las demás ideas están equivocadas por esclavistas, por feudales, por burguesas o pequeño burguesas o por reaccionarias, entre otros argumentos.

Él inaugura el estilo (tan común en los marxistas) de descalificar cualquier tesis diferente por razones de la supuesta procedencia de clase de su interlocutor o rival. Asimismo, el único socialismo viable, correcto y justo es el suyo, al que calificó como «socialismo científico».

En 1864 se constituye en el fundador y dirigente principal de la Primera Internacional en la ciudad de Londres. Allí trata de promover la tesis de que la clase obrera debía tomar el poder político del estado e instaurar su propio régimen o dictadura.

Esa tesis lo enfrenta de manera radical con los bakuninistas que eran socialistas amantes de la libertad y que detestaban la política, la dictadura de cualquier índole y el estado mismo. En vez de tomar el poder, los anarquistas fomentaban destruir el poder del estado y evitar el surgimiento de una nueva dictadura o burocracia roja.

Entre las numerosas obras de Marx se destacan:

Sobre la cuestión judía (1843)
Manuscritos económicos y filosóficos (1844)
Tesis sobre Feuerbach (1845)
Crítica de la Economía Política (1857)
El Capital, volumen 1 (1867)
Crítica del Programa de Gotha (1875)

Con Engels:

La ideología alemana (1845)
Manifiesto Comunista (1848)
El capital, volumen 2 (1885)
El capital, volumen 3 (1894)

Su obra cumbre es El Capital, un análisis crítico del sistema económico capitalista. Publica el primer volumen en vida y los dos siguientes fueron editados por Engels después de su muerte.

Algunas de las ideas claves de Marx son las siguientes:

  1. «El motor de la humanidad es la lucha de clases. La historia de la humanidad es la historia de la lucha de clases».
  2. La economía o infraestructura es la que determina en última instancia la superestructura de la sociedad. Esta última incluye el derecho, la política y la religión de una sociedad. Los grandes cambios sociales y políticos se explican por factores económicos.
  3. A través de la historia humana han existido diferentes economías o modos de producción: comunismo primitivo, modo de producción antiguo o esclavista, modo de producción asiático, modo de producción feudal y modo de producción capitalista.
  4. En cada uno de esos modos de producción hay una clase dominante y una clase dominada: esclavistas y esclavos, burócratas y súbditos, señores feudales y siervos, burgueses y proletarios.
  5. En cada uno de esos sistemas el Estado es un instrumento al servicio de la clase dominante. Hay entonces estado esclavista, estado feudal y estado burgués o capitalista.
  6. En el modo de producción capitalista, el proletario recibe del burgués un salario por su trabajo. Pero una parte del trabajo no es pagada al obrero pues se la apropia el capitalista. A esa parte le llama la plusvalía.
  7. Apropiándose de la plusvalía del obrero el capitalista va realizando una acumulación de capital.
  8. En fin, que para Marx el sistema capitalista es un sistema basado en la explotación del proletario, en lo que llamó la explotación del hombre por el hombre.
  9. Para aumentar su eficiencia y competitividad los capitalistas destinan parte de sus ganancias a comprar máquinas que les permiten economizar en mano de obra, pero dejan a miles de trabajadores desempleados, es decir fuera del mercado laboral.
  10. Según Marx se forma entonces un «ejército de reserva» o de desocupados que presionan hacia abajo el precio de la mano de obra y a la vez se vuelven enemigos del sistema capitalista.
  11. La sociedad se polariza entre burgueses o capitalistas cada vez más ricos y proletarios cada vez más pobres y ganando menos. Asimismo, los desempleados cada vez son más.
  12. Se desencadena una lucha de clases entre burgueses y proletarios que desemboca en la revolución proletaria mundial, la caída del capitalismo, la toma del poder político por parte de la clase obrera y la formación de una dictadura proletaria y socialista como transición al comunismo o sociedad sin clases.
  13. En fin, que Marx es el profeta del inminente entierro del capitalismo, cosa que hasta el momento no se ha producido.

Dentro del esquema antes descrito hay varios aspectos que Marx no previó:

  1. La historia también es colaboración de clases, incluso en el capitalismo.
  2. La aparición y crecimiento de las clases medias dentro del capitalismo.
  3. El aumento del ingreso y de las condiciones de vida de los proletarios en el modo de producción capitalista.
  4. El surgimiento de partidos obreros reformistas que lucharon y consiguieron cambios graduales en beneficio de los proletarios dentro del sistema capitalista.
  5. La formación de sindicatos, asociaciones solidaristas y cooperativas, como nuevos actores dentro del sistema capitalista.
  6. La aprobación en los parlamentos de Garantías Sociales y Códigos de Trabajo que dieron ganancias, beneficios y hasta privilegios a los trabajadores.
  7. Incluso se formó una aristocracia sindical y obrera que en lugar de generar plusvalía se dedicó a vivir de la plusvalía generada por los obreros.
  8. El sistema capitalista resultó mucho más flexible y cambiante y capaz de adaptarse a los nuevos retos. Nació un capitalismo social o social capitalismo.
  9. Las teorías de Keynes y las políticas públicas del New Deal más bien promovieron un estado interventor en la economía y el aumento de los ingresos en la clase proletaria y media y evitaron la polarización de clases.
  10. Finalmente, la revolución socialista triunfó en países atrasados y pobres como Rusia, China, Vietnam, Corea y Cuba y no en los países típicamente capitalistas.
  11. En los nuevos regímenes de modo de producción socialista, la clase proletaria terminó padeciendo una nueva dictadura del partido único sobre el proletariado.

Carlos Marx fallece sobre su mesa de trabajo a los 64 años en Londres el 14 de marzo de 1883.