Venezuela es un país especialmente bendecido por la madre naturaleza, lleno de escenarios naturales que realmente vale la pena contemplar. Tal es el caso del Parque Nacional Archipiélago de Los Roques, que además es el parque marino de mayor extensión de todo el mar Caribe. Un archipiélago es un conjunto de islas, islotes y otras masas de tierra menores cercanas entre sí.

El Archipiélago de Los Roques es un extenso arrecife coralino muy variado y conservado de 36 km de oeste a este y 24,6 km de norte a sur, formado por unas 50 islas y unos 292 cayos. De gran diversidad y perfección escénica, está localizado en el mar Caribe, casi en línea recta al norte de la ciudad de Caracas, la capital de Venezuela, y de La Guaira, su puerto más importante. Por su belleza y gran importancia ecológica, fue declarado parque nacional en 1972.

La isla principal del archipiélago y la más visitada por los turistas es El Gran Roque, la única que está poblada y posee un aeropuerto. La isla está dotada además de posadas y pequeños hoteles acogedores atendidos en su mayoría por sus propios dueños, quienes reciben con la mayor atención y cordialidad a sus visitantes. Desde este punto también salen embarcaciones a las distintas islas, sobre todo Francisquí, Madrisquí y Crasquí. También es posible vivir la experiencia única de alojarse en un velero o un yate con todas las comodidades, que van viajando de una isla a otra y que permiten que puedas disfrutar de un paisaje de amaneceres y atardeceres inigualables, capaces de reconfortarte el alma.

Lo que hace de Los Roques un lugar sorprendente es la enorme extensión de mar tranquilo, la presencia de lagunas, cayos, y playas de blancas arenas de origen coralino y aguas cristalinas de colores extraordinarios. Un lugar sin duda con un toque de romanticismo ideal para los recién casados o para parejas que quieran aprovechar la oportunidad para reinventarse y alejarse de la cotidianidad.

El parque también ofrece a los visitantes para su entretenimiento una variedad de deportes acuáticos, un verdadero paraíso para los amantes del buceo, del windsurf y de la pesca. Esta última en especial en la temporada de noviembre a abril, no puedes perderte la oportunidad de pescar y comerte una fresca y deliciosa langosta.

Quizás la mejor parte de este paraíso en el mar caribe es que los turistas extranjeros pueden visitarlo a un costo absurdamente bajo: con un aproximado de 20 dólares diarios puedes acceder a un confortable hospedaje, ricas comidas y traslado marítimo. Parece increíble pero es cierto; esto se debe al control cambiario y la consecuencia de un mercado paralelo que mantiene en constante devaluación la moneda nacional, ocasionando así que, para el extranjero, destinos turísticos como este sean realmente apetecibles para sus bolsillos.

Las palabras son realmente pocas para describirles lo que sus pupilas podrán vislumbrar en este paraíso terrenal rodeado de tonos azules infinito, lo que su cuerpo será vivificado al inhalar las corrientes de aire puro, la paz interior que brindara sosiego en sus almas que serán limpiadas por las aguas del mar y, por si fuera poco, la diversión no se hará esperar en este mágico lugar. Por lo tanto, si aún tenías dudas sobre donde ir a vacacionar, ya tienes en el mar Caribe una económica y encantadora opción.