Taylor Swift y Beyoncé son sin ninguna duda las reinas del panorama musical internacional (con el permiso de Rihanna, Madonna, Katy Perry y Britney Spears) Pero, ¿cuál es el secreto de su éxito? Algo tan simple como el poder de la feminidad. Ellas son el claro exponente musical del feminismo, una condición de la que presumen y en la cual se inspiran a la hora de componer. Las letras de ambas son un grito a la igualdad, a la independencia de la mujer, al ir más allá del simple amor. Taylor es el perfecto testimonio de como volver a recomponer el corazón tras una ruptura. Sus letras, basadas en sus propias experiencias, son el reflejo de los sentimientos de las mujeres tras un desengaño amoroso. A pesar de ello, Taylor siempre muestra que más allá del dolor hay un halo de esperanza para volver a ser feliz y encontrar el amor. Por su parte, Beyoncé prefiere demostrar que las mujeres son perfectamente independientes y que, si un hombre no te trata como debería, mejor que se vaya por la izquierda.

Esa confianza que demuestran las dos artistas las han hecho estar en lo más alto desde que comenzaron su andadura musical. Ambas conocieron el éxito en plena adolescencia y se convirtieron en ídolos adolescentes. Entre las dos suman un total de 27 premios Grammy y han vendido más de 100 millones de discos. Alejadas del escándalo, a pesar de haber crecido en el seno de una de las industrias más exigentes que tantas promesas ha perdido, siempre han sido veneradas por prensa y público.

Swift y Beyoncé pueden presumir de ser amigas, pero más allá de eso, ambas comparten un ejército de amigas de lo más selecto. Mientras Swift puede vanagloriarse de contar en su grupo de amistades con chicas de la talla de Lena Dunham, Karlie Kloss, Lorde, Cara Delavigne o Selena Gómez; Beyoncé tiene entre sus amigos a artistas de la talla de Kanye West, Rihanna, Justin Timberlake, Madonna o Gwyneth Paltrow.

Además, ambas son pareja de dos de los artistas más importantes de la actual industria musical. Beyoncé puede presumir de llevar al lado de Jay-Z casi quince años, formando el binomio musical más importante hasta la fecha. Por su parte, Taylor Swift comenzó este año una relación con el productor de moda, Calvin Harris, que les ha convertido en una de las parejas favoritas del público.

Beyoncé y Taylor, las dos grandes mujeres que han demostrado que la industria musical aún puede ser dominada por mujeres.