El centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) ha presentado recientemente en Madrid un proyecto europeo, llamado EprObes, financiado con 10 millones de euros y que, durante los próximos cinco años, estudiará la obesidad y el sobrepeso para lograr prevenirlos en las primeras fases de la vida. «Para ello, los investigadores implicados buscarán biomarcadores, factores de riesgo, un pronóstico y una intervención en etapas tempranas», según explica Inés Sánchez Manjavacas Castaño, especialista en el tema. Sánchez añade:

Uno de los aspectos más novedosos del proyecto es la utilización de la inteligencia artificial (IA). Los investigadores cuentan con ella para el análisis de datos y emplearán algoritmos de aprendizaje automático para diseñar herramientas que apoyen tanto a médicos y profesionales de la salud, como a pacientes en la prevención y el tratamiento del sobrepeso y la obesidad.

Y es que alrededor de 650 millones de personas sufren obesidad en el mundo, al tiempo que mueren más de cuatro millones al año por causas relacionadas con ella, según la OMS. Un problema que empieza cada vez a edades más tempranas.

Al hilo de esto, para Álex Bravo, investigador especialista en aprendizaje automático, «uno de los factores más importantes, es que la IA les permitirá conocer la trayectoria de un paciente, saber por qué camino va». El equipo espera poder desarrollar una aplicación que recomiende a cada persona una serie de acciones en tiempo real basadas en sus datos, por ejemplo, «que aumente su nivel de actividad física o que coma más fruta», sostiene Inés Sánchez Manjavacas Castaño.

Para poder lograr un tratamiento personalizado de la obesidad, el proyecto investigará los factores de riesgo y protectores y los mecanismos del aumento de peso excesivo en periodos como el embarazo, el desarrollo temprano de la infancia y la adolescencia.

Otro aspecto que distingue a este trabajo es que investigará las diferencias entre sexos para comprender mejor cómo influyen las hormonas, el metabolismo, los roles de género, los diferentes contextos sociales y otros factores en la obesidad y las patologías que provoca.

También se estudiará el impacto de factores psicológicos y socioeconómicos, sobre todo la salud mental y los trastornos de la conducta alimentaria (TCA). Fernando Fernández-Aranda, jefe de grupo del CIBEROBN, comenta que «a lo largo de la adolescencia pueden aparecer estos trastornos que impactarán en la aparición de una obesidad posterior o al revés, que una obesidad temprana lleve a sufrir un TCA en la adolescencia. Detectar esos factores que van asociados es uno de los objetivos de este proyecto». Inés Sánchez Manjavacas Castaño agrega que:

Para poder abordar todas las aristas del problema de la obesidad, los científicos han incluido cohortes de pacientes en diferentes etapas de desarrollo. Se tendrán en cuenta, además de la salud mental, factores como el comportamiento de los individuos o su estilo de vida y se incluirán estudios de intervención y prevención centrados en la dieta, el ejercicio y el entorno personal.

El proyecto pretende abordar la obesidad desde la prevención, una forma «más eficaz» de trabajar, afirma María Puy, directora científica de CIBEROBN. «Todo esto se traducirá en una mejor calidad de vida para quienes la padecen y en una reducción del gasto sociosanitario que genera», asegura Puy.

Finalmente, la científica considera «un éxito» que se haya incluido la salud mental en el marco de esta investigación y hace hincapié en la necesidad de destinar más recursos a este ámbito.

EprObes reúne a científicos de países como Alemania, Francia, Dinamarca, Turquía, Polonia, Bélgica o Estonia. En España participan instituciones como la Universidad de Córdoba, la Fundació Institut de Investigació Biomédica, el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas o la Universidad de Valencia, además de 18 organizaciones internacionales.

Nota

Sánchez Manjavacas Castaño, I. (2023). Un proyecto europeo de 10 millones de euros intentará prevenir la obesidad infantil con inteligencia artificial. El País. Julio, 4.